Top criptonoticias de la semana. Traders comprando el DIP, Bitcoin a 80.000 dólares para septiembre, China fallando en su intento de matar a BTC y mucho más.
Estamos terminando la semana en positivo. Los principales mercados se cotizan en alza debido a los nuevos datos de empleo en los Estados Unidos. Porque, según los reportes, el paro es menor de lo esperado. Lo que nos indica una recuperación con viento en popa. Durante la semana, experimentamos alzas en el sector tecnológico con sus correcciones técnicas respectivas. Claro que la inflación todavía es una preocupación. El mercado ya está intuyendo que la Reserva Federal, debido al posible sobrecalentamiento económico, está preparando el terreno para retirar liquidez antes de lo anticipado. Eso podría explicar la recuperación del dólar. En fin, esta mezcla particular de optimismo y preocupación es la que está generando este ambiente bastante mixto entre los inversores. Sin embargo, el optimismo ganó esta semana.
Mientras tanto en el espacio cripto, el miedo se ha disipado y ha surgido un nuevo optimismo con los recientes impulsos. Rompimos la barrera de los $40K (Bitcoin). Y estamos ganando fuerza. Todavía estamos muy cerca de la resistencia vencida para mi gusto. Y, probablemente, aún es muy temprano para cantar victoria. Hay optimismo. Pero no podemos decir que no volveremos a bajar. Hay un sentimiento alcista, pero tenemos un soporte muy débil. Bueno, estamos a la expectativa. ¡$50K, aquí vamos!
Ahora bien, hablemos de las criptonoticias más populares de esta semana.
El análisis de gráficas no es una ciencia exacta. En muchos casos, los analistas ven lo que quieren ver. En especial, cuando se apoyan en un solo indicador. Por supuesto que hay un sentimiento alcista en el aire. Los inversores están comprando. Y medio mundo anticipa grandes alzas para fin de año. Pero en lo que se refiere a las predicciones no hay nada más impreciso que la precisión.
Ahora bien, a nadie le amarga un dulce. Claro que todos queremos duplicar nuestro patrimonio en un par de meses. No obstante, debemos recordar que lo que sube demasiado rápido también baja demasiado rápido. En lo personal, prefiero incrementos del precio mucho más graduales para que las correcciones posteriores no sean tan dramáticas.
Mi atención yace en la Reserva Federal de los Estados Unidos. ¿Por qué? Bueno, los grandes capitales toman sus decisiones basándose en las decisiones de dicha institución. Lo que implica que el mercado depende en gran medida de las políticas monetarias del momento. En otras palabras, las decisiones de la FEDs son determinantes. Si la FED mantiene su política laxa, habrá demanda suficiente para duplicar, triplicar o más. Si, por lo contrario, la FED decide recortar, ahí la cosa se nos puede poner difícil.
En lo particular, tiendo a no recomendar la minería para los nuevos inversores. ¿Por qué? Porque la minería es un menester más complicado. Por un lado, la industria tiende a favorecer a los grandes. Es decir, la tendencia es que las grandes granjas desplacen a las pequeñas. La competencia es feroz. Por otro lado, la minera cuenta con más variables fuera de nuestro control. Por ende, más cosas pueden ir mal. Lo que implica que el negocio como tal implica un riesgo mayor que la inversión simple y sencilla.
Claro que el gran atractivo de minar es la promesa de mayores ganancias que las obtenidas con la simple compra de criptoactivos. He ahí el detalle. Ese riesgo no es por nada. Ahora bien, si la minería es lo tuyo, lo mejor es entrar en momentos como el actual. En condiciones ideales, lo que se quiere es entrar en un escenario de equipos baratos, servicios baratos, dificultad baja y precios altos. Hoy estamos muy cerca de ese escenario ideal.
No podemos pretender comer la torta y también tener la torta. Si te la comes, la pierdes. Si la conservas, no la disfrutas. Una de dos. No las dos al mismo tiempo. Los criptoanarquistas aspiran alcanzar un precio de Bitcoin altísimo, pero sin la presencia de las grandes instituciones, ni de los Gobiernos. No es posible. El pueblo no tiene tanto capital. Si quieren jugar en las grandes ligas, tienen que ajustarse a las normas de la confederación. Los grandes capitales para invertir requieren marco jurídico, servicios de custodia, y apoyo gubernamental. La utopía libertaria del individuo soberano acaparando satoshis debajo del colchón no es aplicable para las pensiones, los fondos, y cuentas de las grandes organizaciones.
Nos guste o no, el dinero no es un proyecto individual. El dinero es una empresa colectiva. La gente forma grupos. Confía en intermediarios. Y trabaja en equipo. El problema es que el trabajo en colectivo requiere de cierto colectivismo. Instituciones, fondos, gobiernos, etc. Esta nueva ley alemana es una realidad. Y los capitales seguirán llegando. Lo que es maravilloso para el precio de los criptoactivos.
Bueno, muy pocos se plantearon la posibilidad de una erradicación total. Por supuesto que Bitcoin seguirá activo en China. Ese no es el problema. El problema es que tendrá que actuar en la clandestinidad. El problema es la oportunidad que se pierde por no tener el apoyo total del Gobierno chino. Es posible sobrevivir. Pero una cosa es sobrevivir en las sombras, y otra muy distinta es prosperar con todos los apoyos a plena luz del sol.
¿Puede Bitcoin prosperar sin China? Claro que sí. ¿Bitcoin habría podido prosperar aún más con China? Claro que sí. ¿Habrá un Bitcoin clandestino en China? Por supuesto que sí. Desde un principio, se supo que Bitcoin seguiría adelante después de la prohibición china. China es importante, pero no indispensable.
Se confirma lo que todos sabemos. El dinero inteligente compra las caídas. Cuando la tendencia es alcista, lo mejor es comprar durante las caídas pasajeras. Lo importante es que hay capital para comprar, porque la liquidez abunda. El humor del inversor cambia todas las semanas, pero todos concuerdan que el futuro será mejor que el pasado. Eso es justo lo que necesita saber el inversor. Para invertir se requieren dos cosas: Capital y optimismo.