Top criptonoticias de la semana: Precio de Bitcoin sobre los USD 47,000, Polkadot camino a ATH, bloque 700,000 y más
Históricamente, los septiembres han sido bajistas en la mayoría de los mercados. En esta oportunidad, las constantes precauciones en torno al Covid-19 siguen causando estragos. Por otro lado, tenemos señales mixtas en el campo macroeconómico. La incertidumbre genera volatilidad. Los inversores están muy nerviosos y a la expectativa. Bien sabemos que cualquier cambio en la política monetaria y fiscal en los Estados Unidos y Europa tendrá sus repercusiones. La próxima reunión de la FED es la próxima semana. ¿Cuáles serán los anuncios? Bueno, nos toca esperar.
La variante Delta del Coronavirus, la crisis logística y las preocupaciones en torno a la inflación siguen presentes en un ambiente sumamente mixto y complicado. El sector tecnología, en particular, se ha visto afectado. Sin lugar a dudas, los inversores necesitan más claridad. Esperemos que esa claridad la encontremos en el mes de octubre.
Mientras tanto en el entorno cripto, Bitcoin, pese de una recuperación (relativa) de su última gran caída, aún se encuentra luchando por debajo de la barrera de los $50K. Esta resistencia ha demostrado ser bastante fuerte. A pesar de que la hemos superado en varias ocasiones, no hemos podido romperla definitivamente. Muchos minoristas están distraídos especulando con los proyectos más de moda en el sector altcoin. Todavía nos falta convicción para alcanzar un nuevo máximo histórico en Bitcoin.
Ahora bien, hablemos de las criptonoticias más populares de esta semana.
En honor a la verdad, no es muy difícil predecir que un activo especialmente volátil caerá después de un gran alza. Después de la euforia, viene la caída. Lo que comúnmente ocurre es que los inversores se enamoran con mucha facilidad e idealizan su inversión. Los especuladores más ingenuos, debido a la codicia, asumen que, si algo sube, subirá para siempre. Error. Mientras más sube un activo, mayor es su riesgo. Los muy ilusos son los primeros en sufrir pérdidas, porque compran a precios muy elevados. Se trata del inversor emotivo que compra con una fe irracional. En el mundo de las finanzas, es sumamente útil ser un escéptico.
Las altcoins son más riesgosas que Bitcoin por un asunto de liquidez. Si una moneda sube mucho de precio, normalmente es un tema de poca liquidez. Sin embargo, eso, con demasiada frecuencia, se interpreta, en este ecosistema, como una rotunda de señal de éxito. Podemos leer en la prensa especializada titulares como estos: “X moneda supera a Bitcoin en los últimos meses”. Ahora bien, en un mercado tan especulativo como este, el precio parece ser lo único que realmente importa. Constantemente, se menosprecia el valor de la estabilidad. Un proyecto pequeño, indiferentemente de sus méritos, puede duplicarse en cuestión de días debido a la especulación. Pero no puede sostener su precio por mucho tiempo. El dinero normalmente se va del mismo modo como llegó.
El tiempo pasa y Bitcoin no ha hecho otra cosa sino crecer de manera sostenida. Bitcoin es rico en fundamentales: Longevidad, comunidad, reputación, infraestructura, etc. Todavía es la criptomoneda dominante. Y sus inversores han aumentado en número y calidad. Si bien es cierto que ya no es el único proyecto en el ecosistema, definitivamente es el más consolidado.
La fiebre altcoin ciertamente existe. Pero se trata de un fenómeno que afecta a los sectores más especulativos. Ahora todo parece girar en torno a los altcoins porque los minoristas más especuladores son sumamente activos en las redes sociales. O sea, los especuladores más codiciados están sobrerrepresentados en las redes. Eso no implica que Bitcoin está perdiendo terreno. Lo que está sucediendo es un cambio de configuración a nivel de comunidad. En otras palabras, Bitcoin se está convirtiendo en la criptomoneda de los grandes capitales y del dinero inteligente.
Con el tiempo y el tamaño, Bitcoin ha ganado estabilidad. Claro que estamos hablando de una estabilidad relativa. Por supuesto que aún es un activo bastante volátil. No obstante, no es tan volátil como antes. Esto significa dos cosas. En primer lugar, se ha convertido en un activo más seguro (menos riesgoso). Y, en segundo lugar, se está convirtiendo en un activo más aburrido. Me refiero al rendimiento. Es decir, es sumamente improbable volver a ver en Bitcoin incrementos de 1000X o más en los próximos años. ¿Por qué? Porque Bitcoin es cada vez más líquido.
Los mercados tienden a concentrarse en unos pocos actores. Los exchanges son vitales para este sistema. Y es sumamente importante la “calidad” de esos exchanges: Seguridad, transparencia, regulación, etc. Curiosamente, Binance no se encuentra en la lista por un asunto regulatorio, pero esperemos que la situación se torne pasajera.
Prefiero hablar de las carteras que cobran $6 por enviar $10. ¿A quién engañamos? Las comisiones son sumamente costosas. Obviamente que no tenemos problemas con los montos grandes. El problema yace en los montos pequeños. No podemos tapar el sol con un dedo como titulares como este. Cualquiera lee esto y piensa que el espacio cripto está libre de comisiones. No, ese no es el caso. En muchísimos casos, las comisiones son excesivas.
Desarrollo y fundamentales son muy importantes. Pero no podemos subestimar el rol de la especulación y la promoción. Los precios suben, pero no todo es gracias a los fundamentales. Un porcentaje, sí. Pero no la totalidad. La gran mayoría de las alzas que estamos disfrutando en el mercado bursátil y en el mercado cripto se la debemos a la liquidez inyectada por la FED. No podemos caernos a ilusiones. Este boom financiero es esencialmente artificial. Se trata de una lluvia de dinero.
Las criptomonedas se han beneficiado de esto en grado sumo. Y los proyectos que logren captar una mayor atención de los inversores obtendrán los mejores rendimientos. Así de sencillo. Por fundamentales, promoción, o especulación, las cosas suben de precio cuando entra dinero. El interés es la clave para alcanzar nuevos máximos históricos.