Terminando el 2020 con estilo: 3 factores clave predicen un aumento del precio de Bitcoin
El precio de Bitcoin (BTC) ha aumentado casi un 30% desde finales de junio, de 8.905 dólares a poco menos de 11.500 dólares al cierre de la edición. Tras el fuerte repunte de la criptomoneda dominante, tres factores macroeconómicos apuntan a una tendencia optimista a medio plazo. Estos macro factores apuntan a un ciclo de precios positivo a medio y largo plazo, pero sugieren que, a corto plazo, el impulso se desvanecerá y se producirá una fase de consolidación.
Como Cathy Wood, CEO de Ark Invest, discutió en el podcast de In the Know, hay técnicamente poca resistencia entre 13.000 dólares y el máximo histórico de BTC de 20.000 dólares. Wood señaló que BTC podría ver un nuevo rango de trading entre 10.000 y 13.000 dólares, lo que establecería una fase de consolidación saludable:
“Ese [nivel] de 13.000 dólares es importante porque si lo superáramos, entonces, en términos técnicos, habría muy poca resistencia y probablemente volveríamos a los picos que vimos a fines de 2017, es decir, alrededor de 20.000 dólares. Ahora, no estamos seguros de que eso vaya a suceder. Podríamos mantenernos en un nuevo rango de operaciones, sólo que a un nivel un poco más alto que los recientes seis a diez. Tal vez estemos en el rango de 10.000 a 13.000 dólares. Sin embargo, una ruptura”.
Si Bitcoin permanece en el rango de los 10.000 a 13.000 dólares durante un período prolongado sigue siendo incierto. En los últimos tres años, BTC ha tendido a consolidarse durante septiembre y octubre y a repuntar a mediados de noviembre. Teniendo en cuenta la activación de la reducción de la recompensa del bloque que se dio el 11 de mayo, la probabilidad de una tendencia alcista en noviembre a diciembre sigue siendo alta.
La desaparición del dólar beneficia a Bitcoin
Una narración persistente en torno a la prosperidad a largo plazo de Bitcoin es la caída del dólar estadounidense. En los últimos meses, principalmente debido a la pandemia y a la lucha de la economía estadounidense por reabrir, el valor del dólar ha caído frente a otras monedas de reserva.
El 31 de julio, Lee Hardman, analista de divisas del Grupo Financiero Mitsubishi UFJ, dijo que la liquidación del dólar era “implacable”. Según Supriya Menon, estratega de múltiples activos de Pictet Asset Management, varios factores macroeconómicos, entre ellos el aumento vertiginoso del número de casos de COVID-19 y la incertidumbre en torno a las elecciones presidenciales de noviembre, estaban contribuyendo a la debilidad del dólar.
Meltem Demirors, directora de estrategia de CoinShares, cree que los períodos de incertidumbre económica y la debilidad del dólar probablemente beneficiarían a Bitcoin, al igual que lo hacen con el oro:
“Entonces, ¿dónde se sitúa Bitcoin en el ciclo económico? Durante los períodos de incertidumbre económica y debilidad del dólar, es probable que Bitcoin se beneficie de la misma manera que el oro. Si la financiarización de bitcoin continúa, no podrá permanecer aislado del sistema financiero”.
No está claro si el impulso descendente del dólar ya ha tenido todo su efecto en el precio de Bitcoin. El dólar estadounidense ya ha caído a un mínimo de dos años y, a corto plazo, los analistas prevén una recuperación del dólar.
Sin embargo, dos variables que podrían hacer que el dólar cayera aún más son los bajos tipos de interés y el considerable paquete de estímulos de la Unión Europea. El euro ha superado al dólar en las últimas semanas, ya que los inversores consideraron convincente el fondo de recuperación de 750.000 millones de euros de la Unión Europea. A pesar de las agresivas políticas fiscales de Europa, el camino de la economía de los Estados Unidos hacia la recuperación no se ha establecido con firmeza. Patrik Schowitz, estratega global de JPMorgan Asset Management, señaló:
“El rendimiento económico superior de los Estados Unidos en relación con la zona del euro y Japón (ya no) parece garantizado, al menos durante los próximos años, dada la vacilante respuesta contra el virus. […] La disminución de su ventaja en materia de tipos de interés hace que el dólar sea menos atractivo y empuja a los inversores a considerar los depósitos en otras monedas. Estos factores cíclicos no cambiarán apresuradamente y es probable que el dólar estadounidense tenga espacio para seguir cayendo”.
La tendencia a la baja del dólar coincide con las expectativas de un aumento de las tasas de inflación a medio plazo. Si muchos perciben a Bitcoin como un almacén de valor y una potencial cobertura contra la inflación, el próximo discurso del Presidente de la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés), Jerome Powell, podría fortalecer la imagen de BTC a largo plazo.
El 27 de agosto, se espera que Powell dé un discurso en una conferencia virtual de la Reserva Federal y trate una inflación suave. Por ahora, los mercados no cuentan con que la Fed lidere cambios significativos en sus políticas fiscales. Como tal, incluso si la Fed dice que podría dejar que las tasas de inflación suban por un tiempo, podría no tener un efecto profundo en el BTC.
Correlación con el oro
Posiblemente debido a la caída del dólar, el oro y Bitcoin han visto un ciclo de precios más correlacionado en los últimos meses. De acuerdo con los datos de Skew, Bitcoin y el oro han subido en tándem desde mediados de julio y han bajado simultáneamente desde la primera semana de agosto.
Hay varias razones por las que Bitcoin y el oro podrían estar viendo movimientos de precios similares. Primero, a través de la creciente actividad institucional, la imagen pública de BTC como almacén de valor se ha fortalecido. Las empresas de inversión, como Ark Invest, han citado la compra masiva de Bitcoin de 250 millones de dólares por parte de MicroStrategy como una estrategia simbólica que podría impulsar el sentimiento en torno a Bitcoin a largo plazo. En segundo lugar, tanto Bitcoin como el oro parecen haber demostrado una correlación inversa con las acciones desde principios de agosto.
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Las similitudes en los ciclos de precios del oro y de Bitcoin no benefician necesariamente a la BTC en el futuro inmediato, pero insinúan que los inversores podrían estar considerando a la BTC más como una reserva de valor y un activo de refugio seguro que como un activo de riesgo como las acciones del mercado bursátil.
Métricas macro a largo plazo
Varias macro-métricas on-chain sugieren que Bitcoin está viendo una fase de acumulación extendida, donde los inversores están comprando cada vez más BTC con la intención de mantener. Grayscale, una empresa de inversiones centrada en cripto con 5.900 millones de dólares en activos gestionados, descubrió que el número de BTC mantenidos durante más de un año ha aumentado sustancialmente.
Looking at how much $BTC has been held for >1 year is a supply-side metric to help investors assess #Bitcoin’s value. If the number of investors holding #HODL increases, then less BTC is available to trade on exchanges, thus less supply. More metrics here: https://t.co/3D7bXoJ1Jw pic.twitter.com/OO86XrNwz5
— Grayscale (@Grayscale) August 24, 2020
Citando datos de Glassnode, la empresa de análisis de mercado de criptodivisas Unfolded dijo que el número de direcciones de Bitcoin con más de 11 millones de dólares alcanzó un nuevo máximo histórico. La tendencia muestra que más inversores a gran escala están acumulando BTC, probablemente con una tesis de inversión a largo plazo y la intención de “HODL”.
Generalmente, la mayoría de los datos on-chain y los factores macro apuntan a una alta probabilidad de que el mercado alcista de Bitcoin entre en 2021. A corto plazo, hay varios riesgos en la estructura del mercado que podrían impedir una ruptura temprana. El bloqueo más prominente en el ciclo de precios a corto plazo de BTC es probablemente el pesado rango de resistencia de 12.000 a 13.000 dólares, que marcó el pico de los intentos anteriores de romperse de 14.000 dólares.
La confluencia de la probabilidad de que Bitcoin vea una baja volatilidad en septiembre y octubre y el repetido rechazo de 12.000 dólares podría frenar el impulso de BTC a corto plazo. Pero a medio y largo plazo, especialmente a finales de noviembre y diciembre, hay una abundancia de factores macro que podrían reforzar el argumento a favor de una subida de los precios de Bitcoin.
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