Recordando las contribuciones de Hal Finney a blockchain y más allá
Han pasado seis años desde que Hal Finney falleció por la Esclerosis Lateral Amiotrófica, o ELA. Finney es conocido como uno de los primeros partidarios de Bitcoin (BTC), y uno de los primeros en responder al mensaje inicial de Satoshi Nakamoto en la lista de correo de Cypherpunk. En los primeros días de Bitcoin, fue el único que entendió completamente las posibilidades de la tecnología, sin ser abiertamente escéptico sobre sus perspectivas.
Finney fue uno de los criptógrafos más conocidos en la comunidad cypherpunk incluso antes de su participación en Bitcoin. Al principio de su carrera, trabajó para la Corporación PGP, que poseía el software informático Pretty Good Privacy, y permitía a los usuarios encriptar sus textos, correos electrónicos y archivos. En 2004, Finney desarrolló un software de prueba de trabajo reutilizable, o RPOW. A diferencia del Hashcash de Adam Back y muy parecido a Bitcoin, la prueba de trabajo era de hecho reutilizable, de ahí el nombre. Este invento fue uno de los principales pasos en el camino hacia Bitcoin, aunque Satoshi no citó el trabajo de Finney en su libro blanco.
El criptógrafo Adam Back le dijo a Cointelegraph que había tenido algunos intercambios de correo electrónico con Finney a lo largo de los años, incluida una solicitud para que Back comentara sobre RPOW. Aunque nunca se conocieron en persona, Back recuerda a Finney con cariño:
Bueno, nunca lo conocí en persona, pero considero que es una personalidad constructiva más interesada en construir cosas que en discutir sobre política. Mientras construía cosas con intención cypherpunk, solo se enfocaba en la parte constructiva de las conversaciones. No creo que lo haya visto participar en discusiones en línea en la lista de cypherpunks.
Hal Finney fue la primera persona fuera de Satoshi en comenzar a minar Bitcoin, y también fue el destinatario de la primera transacción de Bitcoin. Si bien la progresión de su enfermedad fue inicialmente lenta, pasó los últimos meses de su vida completamente paralizado. En su publicación de despedida en Bitcointalk.org, restó importancia a su participación en Bitcoin. Aun así, se le recuerda con cariño como uno de los mayores contribuyentes del espacio Blockchain.
Antes de su muerte, Finney y su esposa, Fran, trabajaron para crear conciencia y recaudar fondos para la ELA. Desde su partida, Fran Finney ha continuado con el legado de su marido.
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