Precio de Bitcoin: ¿Caída o rebote?
¿Qué pasa con Bitcoin? ¿Por qué está subiendo tanto? ¿Es que se ha vuelto loco? No, no se ha vuelto loco. Bueno, quizás un poco. Pero hay una razón detrás de esta locura. Y esa razón se llama ETF.
Un ETF es un fondo de inversión que cotiza en la bolsa y que replica el comportamiento de un activo, como por ejemplo el oro, el petróleo o Bitcoin. ¿Qué ventajas tiene esto? Pues que permite a los inversores acceder a ese activo de forma fácil, segura y regulada, sin tener que comprarlo directamente. Y esto es algo muy anhelado por muchos, aparentemente.
Y resulta que hay varios ETF de Bitcoin que están esperando la aprobación de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), que es el organismo que regula el mercado financiero. Uno de ellos es el de BlackRock, la mayor gestora de fondos del mundo. Si la SEC aprueba alguno de estos ETF, sería una gran noticia para Bitcoin, ya que supondría una mayor demanda, una mayor legitimidad y una mayor confianza.
Por eso, el mercado está tan emocionado con las últimas alzas. Las alzas, por cierto, que fueron causadas por las expectativas en torno a la posible aprobación de un ETF. Especialmente el ETF de BlackRock. Bitcoin llevaba mucho tiempo estancado por debajo de los $31K. Y el rompimiento de esta vieja resistencia llegó como una luz de esperanza para un mercado que ya se estaba cansando de tanto letargo.
Claro que no todo es tan simple como parece. La SEC no es muy amiga de Bitcoin, y ya ha rechazado varias solicitudes de ETF en el pasado. Además, hay otros factores que pueden influir en el precio de Bitcoin, como la oferta, la competencia, la regulación, la innovación, la adopción, la especulación, la manipulación, la geopolítica, la psicología, la astrología…(*chiste)
Ahora bien, debemos recordar que Bitcoin es un activo volátil, arriesgado y complejo. ¿Qué viene ahora? ¿Caída o rebote? ¿Te gustaría saber el futuro? Pues lo siento, pero no puedo ayudarte. Nadie puede. Porque el futuro es incierto, impredecible e incontrolable. Y el que diga lo contrario, te está mintiendo.
El arte de la predicción es una aventura sumamente arriesgada. Nadie conoce el futuro. Es obvio que nadie sabe a ciencia cierta qué habrá: rebote o caída, victoria o derrota. Y eso es un problema, porque el inversor no tiene más opción que tomar decisiones en un contexto de alta incertidumbre. ¿Qué hacemos? Usamos las probabilidades.
Las probabilidades son una forma de medir la confianza que tenemos en que algo ocurra o no. Por ejemplo, si lanzamos una moneda al aire, tenemos un 50% de probabilidad de que salga cara y un 50% de que salga cruz. Si tiramos un dado, tenemos un 16.67% de probabilidad de que salga cada número. Si jugamos a la lotería, tenemos un 0.00001% de probabilidad de que nos toque el premio mayor.
Ahora bien, ¿qué es el soporte y la resistencia? Son dos conceptos básicos del análisis técnico que se usan para estudiar el comportamiento del precio de un activo, como por ejemplo Bitcoin. El soporte es el nivel al que el precio tiende a rebotar cuando baja, porque hay más compradores que vendedores. La resistencia es el nivel al que el precio tiende a caer cuando sube, porque hay más vendedores que compradores.
En este momento, se podría decir que nuestro nuevo soporte es nuestra vieja resistencia. Entonces, podemos usar el nivel de $31K como referencia aproximada. Y, en teoría, el soporte está vigente. Lo que significa que hay más probabilidad de que haya un rebote que una caída. Pero ojo, que esto es solo en teoría. En la práctica, nadie sabe lo que va a pasar.
Si no se da el rebote, seguramente tendremos una caída. Ese escenario no es tan probable, porque el soporte, en teoría, debe soportar. Sin embargo, que ese sea en estos momentos el escenario menos probable, no quiere decir que no vaya a pasar. Porque el mercado es caprichoso, impredecible e incontrolable. Y a veces, nos da sorpresas desagradables.
Hay que tomar en cuenta que el entusiasmo actual se ha construido sobre un rumor. El mercado está convencido de que ese rumor es prácticamente un hecho. Sin embargo, eso no es el caso. Si en dado caso que la SEC rechace todas las solicitudes, se cae el entusiasmo como un castillo de naipes.
¿Qué es un rumor? Es una información que se difunde sin confirmar, y que puede ser verdadera o falsa. Y el entusiasmo causado por un rumor es una emoción puede ser justificada o exagerada. Pues resulta que el mercado de Bitcoin está lleno de rumores y de entusiasmo. Y eso puede ser peligroso.
El rumor es que la SEC va a aprobar pronto un ETF de Bitcoin. El entusiasmo es que el mercado está convencido de que ese rumor es prácticamente un hecho, y que ya está descontado en el precio. Pero eso no es así. La SEC no ha dicho nada aún, y puede que diga que no. Y si dice que no, se cae el entusiasmo. Y con él, el precio por debajo de $31K (el soporte).
¿Qué hace un trader cuando el precio de un activo se acerca a un nivel de soporte? ¿Se queda mirando la pantalla como un hipnotizado? ¿Se pone a rezar para que el precio rebote o rompa el soporte? ¿Se va a tomar un café y espera a que pase algo? No, nada de eso. Un trader toma decisiones basadas en la probabilidad, pero gestiona su riesgo en caso de que las cosas no salgan como espera. ¿Cómo se hace eso? Muy sencillo, siguiendo un plan.
Cuando el precio de un activo se acerca a un nivel de soporte, los traders tienen dos opciones: comprar o vender. Si el precio rebota sobre el soporte, significa que hay más demanda que oferta y que el precio puede seguir subiendo. En ese caso, los traders compran el activo y esperan ganar dinero con su aumento de valor. Esto se llama entrar en largo.
Si el precio rompe el soporte, significa que hay más oferta que demanda y que el precio puede seguir bajando. En ese caso, los traders esperan ganar dinero con su disminución de valor. Esto se llama entrar en corto.
Los buenos traders no se dejan llevar por sus emociones o por sus predicciones. Ellos se adaptan a lo que el mercado les muestra y siguen un plan. Si el precio rebota, van con el plan A. Si el precio rompe, van con el plan B. Y siempre ponen un límite a sus pérdidas, por si el precio cambia de dirección. Esto se llama poner un stop-loss.
No se trata de adivinar el futuro, sino de tener una estrategia.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.