No todo en la industria de las criptomonedas necesita ser regulado, según Brian Brooks, ex CEO de Binance US
Si el primer semestre de 2021 estuvo marcado por los máximos históricos en los precios de Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH) y también por el desplome del mercado que siguió a los nuevos récords, el segundo semestre del año debería ser recordado por el enfrentamiento entre los reguladores del gobierno estadounidense y la comunidad de criptomonedas.
El crecimiento de la industria, con su premisa inherente de eliminar intermediarios, hizo inevitable que los reguladores dirigieran su atención al sector. La primera alarma se produjo por la vaguedad y amplitud de la terminología utilizada para definir lo que serían los “brokers” en el texto del proyecto de ley bipartidista de infraestructuras aprobado en julio por el Senado estadounidense.
Recientemente, fue el enfrentamiento entre la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de EE.UU. y Coinbase por un producto de inversión basado en préstamos criptoactivos. La SEC amenazó con demandar a Coinbase si el principal exchange de EE.UU. seguía adelante con el lanzamiento del producto alegando que se trata de una oferta de valores. Los dirigentes de las empresas y los miembros de la comunidad de criptomonedas han criticado la falta de diálogo de la SEC y han considerado la medida como ataque contra la industria.
Según Brian Brooks, quien en su día fue Contralor de la Moneda en funciones y ex CEO de Binance US, y que por tanto ha estado a ambos lados de la mesa discutiendo cuestiones de regulación, el problema es que la SEC se basa en las normas y conceptos tradicionales del mercado para abordar una industria naciente cuyas particularidades exigen un nuevo enfoque legislativo.
En un panel sobre la adopción institucional de los activos digitales en SALT, una conferencia bianual que reúne a personalidades de las finanzas mundiales y del sector tecnológico, Brian Brooks presentó su perspectiva sobre las posibles directrices reguladoras:
“No parto del reglamento. Empiezo con: ‘¿Cuál es la actividad que estamos tratando aquí y qué aspectos de ella deberíamos regular?’ Y no parto de la base de que todo lo que está ocurriendo en la industria de las criptomonedas debería estar sujeto a la regulación bancaria o de valores”.
Brooks argumentó que la regulación se ocupa de las cuestiones planteadas por los individuos, pero las criptomonedas y la tecnología Blockchain se ocupan del código de programación.
Si bien esto es cierto sólo en parte, ya que hay personas que desarrollan los códigos de los protocolos, pero él sólo estaba aprovechando la premisa fundamental de la tecnología blockchain, que es la descentralización y el potencial que tiene para eliminar “las malas prácticas, el fraude y la autolimitación de la ecuación”, como afirmó en su participación en la conferencia.
En ese caso, ¿qué queda por regular? Normas para compensar cualquier pérdida relacionada con ataques maliciosos y normas de ciberseguridad, según Brooks.
Brett Tejpaul, director de ventas, comercio y custodia de Coinbase, dijo que siempre ha sido decisión de ciertas empresas asumir riesgos en el vacío legal. Y añadió:
“Durante todos estos años, en general, la regulación ha seguido a la innovación. Así que no hubo un momento en el que estuviera absolutamente claro cuál era el telón de fondo regulatorio que permitiría la entrada de capital”.
Brooks, que fue jefe interino del Contralor de la Moneda en la administración Trump, echó parte de la culpa de los excesos regulatorios a los demócratas. Citó el testimonio del presidente de la SEC, Gary Gensler, ante el Comité Bancario del Senado el martes para decir que los demócratas “creen que toda actividad relacionada con los valores debe estar sujeta a la regulación de los mismos”.
Hay opiniones divergentes y el futuro está abierto, pero la opinión unánime de los miembros de la comunidad de criptomonedas es que tienen razón. Pero eso por sí solo no garantiza que salgan ganando, como resumió Glenn Barber, director de ventas y desarrollo de negocio de la empresa de custodia de criptomonedas Copper, en otro panel de la conferencia:
“Tenemos la oportunidad de hacer algo que afectará al futuro manteniendo lo que podría ser una ventaja competitiva muy importante en términos de financiación y de la forma en que manejamos esta tecnología, o podríamos perderla”.
Sigue leyendo: