No, Bitcoin no está entrando en un ciclo bajista como el de 2018, sugieren nuevos datos, mientras BTC apunta a los USD 45,000
La escala de la corrección bajista en curso de Bitcoin (BTC) podría no ser tan alarmante como lo fue en 2018, indica datos compartidos por Glassnode.
La compañía de análisis blockchain informó que los inversores que han hecho hold con Bitcoin durante más de un año mostraron un menor interés en liquidar sus inversiones en comparación con aquellos que mantuvieron el activo digital durante tres a seis meses. Su conjunto de datos cubrió el período de corrección de Bitcoin de alrededor de $65,000 el 14 de abril a alrededor de $44,000 el lunes.
Por otro lado, todo el grupo de inversores fueron fundamentales para hacer caer el precio de BTC en 2018 de $19,891 a $3,128.
Con una mayoría de “monedas antiguas” que no se decidieron a asegurar sus ganancias del 275% interanual incluso después de una corrección bajista del 35%, los datos de Glassnode insinuaron un fuerte “comportamiento de hodling” que podría hacer que Bitcoin escapara a un evento de capitulación masiva similar al de 2018.
Glassnode señaló:
“A pesar de un fuerte repunte a $45k, el mercado de Bitcoin aún no ha visto un aumento significativo en las monedas antiguas (> 1 año) que se gastan. Esto es muy diferente al mercado bajista de 2018, donde los veteranos tomaron liquidez de salida en la mayoría de los rallies de alivio”.
La venta por pánico se mantiene austente
Las valoraciones excesivas, lideradas por el frenesí de las ofertas iniciales de monedas, fueron la causa principal del desplome del mercado de criptomonedas en 2018. Algunas empresas aleatorias recaudaron miles de millones de dólares para construir plataformas blockchain, pero la mayoría de ellas resultaron ser vaporware o estafas finalmente.
Cuando finalmente estalló la burbuja, el mercado de criptomonedas terminó cayendo de $700 mil millones en enero de 2018 a $102 mil millones en diciembre de 2018.Como resultado, Bitcoin, que era una de las monedas elegidas durante las recaudaciones de fondos de inicio, cayó un 85.27% desde su entonces récord de $19,891.
Sin embargo, el repunte de los precios de Bitcoin en 2021 se originó en bases macroeconómicas sólidas, ya que los inversores buscaban refugios seguros contra las políticas monetarias flexibles implementadas por los bancos centrales de todo el mundo. Como resultado, los esfuerzos de los bancos centrales para proteger a las economías de las secuelas financieras de la pandemia del coronavirus llevaron la deuda global a más de 281 billones de dólares el año pasado.
Eso fue el 355% del producto interno bruto mundial. Según el Instituto de Finanzas Internacionales, se espera que los préstamos aumenten en otros $10 billones en 2021.
“La gente tiene menos riqueza y más deuda. La devaluación de las monedas fiat ha hecho que todo sea más caro a nuestro alrededor”, dijo Anthony Pompliano, socio de Pomp Investments, en una nota a los clientes, y añadió:
“La promesa de Bitcoin es que se iniciará una nueva era de dinero sólido. La moneda está fuera del sistema. Nadie la controla. La gente podrá volver a ahorrar para alcanzar la libertad financiera. El dinero no perderá valor con el tiempo. De hecho, el poder adquisitivo aumentará”.
¿Regresan los inversores a corto plazo?
El reciente repunte de Bitcoin de menos de $30,000 a más de $45,000 también coincidió con un modesto aumento en el porcentaje de inversores que compraron el activo digital por última vez hace tres a seis meses.
El 19 de julio, cuando Bitcoin se tambaleaba cerca de los $30,000, la producción neta de transacciones no gastadas de la criptomoneda por parte de 3 millones a 6 millones de inversores era del 12.84%. El lunes, esta cifra aumentó hasta el 13,44%. Bitcoin cotizaba en torno a los $45,130 el mismo día, mostrando que las manos débiles se estaban volviendo fuertes.
Los puntos de vista y opiniones expresados aquí son únicamente los del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de Cointelegraph.com. Cada inversión y movimiento de trading implica un riesgo, debe realizar su propia investigación al tomar una decisión.
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