Leonardo Cositorto de Generación Zoe convoca marcha desde la cárcel

El empresario Leonardo Cositorto habló desde la cárcel de Bouwer, ubicada cerca de la capital de Córdoba, en el centro de Argentina.

Aseguró que, desde Generación Zoe, van a seguir operando a pesar de estar procesado por la Justicia por presunta estafa a un grupo de ahorristas, mediante el sistema Ponzi.

“Nos dedicamos a la educación al turismo y a pagar a 7.5, que fue la gran difamación que sufrí, cuando el dólar sube 37% y el Bitcoin un 20%. Veníamos cumpliendo de manera impecable, pero me difamaron.”

En una entrevista al canal de noticias C5N, Cositorto aseguró que es víctima de una campaña impulsada por los medios de comunicación.

“Me empiezan a condenar públicamente sin ninguna prueba y me ponen como el Rey de la Estafa. No sé a quién estafábamos, estábamos ayudando a 110 mil personas a nivel mundial. Desde Villa María y Buenos Aires, empiezan a hacer toda esa campaña.”

Para el empresario, Zoe fue vista como una amenaza. De acuerdo con su teoría, en ese momento comenzaron las “movidas mediáticas” solventadas económicamente por las principales compañías del país.

Frente a la consulta sobre la investigación que se inició en Estados Unidos, por una posible vinculación de ahorristas de Zoe con el narcotráfico, Cositorto aclaró que no puede poner “las manos en el fuego por las 110 mil personas” que llegaron a participar.

“Perdimos 156 millones de dólares porque tres graciosos de Twitter, más unos cuantos empresarios corruptos, y una línea política decidieron quitarnos del mercado. Terminan ellos con la espalda oxidada cortando siempre hacia abajo. Yo acá no veo a ningún político corrupto detenido. Yo pido la libertad de todos los que están en prisión preventiva.”

Maslatón le respondió a Cositorto

En una entrevista en la que afirmó cosas contradictorias y evitó algunas preguntas, el líder de Zoe que tiene prisión preventiva por estafa, advirtió que la “campaña de difamación” en su contra también fue “financiada” por grandes empresarios: “Los dueños de Mercado Pago, de Ualá”, dijo.

Además, agregó que su empresa Zoe ayudaba a más de 100 mil personas en todo el mundo y que se dedicaba a negocios financieros y coaching. No negó, por otro lado, que gente cercana a él está haciendo una colecta para pagar su fianza.

Ante estas afirmaciones, algunos de los mencionados respondieron vía Twitter. Tal es el caso del empresario Carlos Maslatón, cuyo tuit fue respondido por otro aludido, Pierpaolo Barbieri, CEO de Ualá.

Llamado a una manifestación

Leonardo Cositorto también denunció al sistema judicial de la Argentina, especialmente por las prisiones preventivas.

“Estoy alojado en Bouwer hace 100 días. Los primeros 15 me pasearon por cinco cárceles de la Argentina, las cuáles están sobrepobladas. Quiero hablar de los 4 mil detenidos que hoy están lejos de sus familias y que les han destrozado sus negocios por un grupo de fiscales verticalistas.”

Por lo antes mencionado, el líder de Zoe convocó una marcha para el miércoles 27 de julio frente a un centro comercial de la ciudad de Córdoba. La misma, explicó, es para reclamar por “toda la gente detenida de manera ilegal”.

El autoproclamado gurú financiero está alojado en el MD1 de la cárcel de Bouwer, el pabellón al que van los acusados y condenados por delitos económicos, donde hay algo más de espacio y un poco más de confort que en el resto del penal.

Zoe es una organización que operaba hace poco más de cinco años y que se presentaba en sociedad como una compañía de coaching y liderazgo. La empresa ofrecía devoluciones sobre la inversión con valores inéditos, varias veces por encima de cualquier otro negocio conocido.

Cuando una persona realizaba un aporte, ese dinero quedaba inmovilizado por un año. A cambio, el cliente recibía un 7,5% en dólares cada mes, lo que sería la rentabilidad del negocio.

El retorno prometido no llegaba para cientos de ahorristas. Allí comenzaron las denuncias en diferentes países, la detención de Cositorto y la posterior caída de la organización.

Por el caso ya hay 20 detenidos. Solo queda prófugo el ex juez Héctor Yrimia, arquitecto legal del conglomerado de firmas cuyo rostro visible era Cositorto.