¿Es México el país que más adopta el metaverso en la región?

En el panorama tecnológico actual con sus distintas esferas de la transformación digital, la adopción del metaverso se ha erigido como una tendencia líder; si bien otros países como España y China lideran las inversiones en este campo, el caso de México no deja de resultar único e intrigante.

A medida que la frontera entre el mundo digital y el mundo físico se desvanece, los países de todo el mundo compiten por posicionarse en la vanguardia de esta transformación. En esta carrera, México emerge como un contendiente sorprendentemente destacado en América Latina.

A pesar de los desafíos económicos y las incertidumbres del mercado, México ha demostrado un firme compromiso con la adopción del metaverso, promoviendo su crecimiento y explorando su potencial para la economía y la sociedad en general.

Desde los años 2021 y 2022, México ha estado experimentando un crecimiento constante en la adopción del metaverso. En ese periodo, tanto academias como empresas comenzaron a incorporar el metaverso en sus modelos operativos y de negocios.

Sin embargo, lo que realmente capturó la atención fue la entrada de Meta (anteriormente conocida como Facebook) al escenario del metaverso en México. La empresa no solo lanzó experiencias en este nuevo espacio digital, sino que también diseñó un plan de negocios específico para el metaverso en el país, marcando un hito importante en el camino hacia una adopción más amplia y significativa.

La expansión del gigante tecnológico Google también juega un papel fundamental en el avance del metaverso en México. La creación de su Región Nube en Querétaro no solo demuestra su compromiso con el país, sino que también refleja su creciente apoyo a las industrias Web 3.0, que son esenciales para el desarrollo y la sostenibilidad del metaverso.

Esta expansión no solo brinda oportunidades de desarrollo tecnológico, sino que también facilita la creación de un ecosistema propicio para la innovación y la adopción del metaverso en diversas industrias.

El interés y la participación de los empresarios y profesionales mexicanos en el metaverso son otros dos factores clave que impulsan su adopción en el país. Los individuos de entre 30 y 40 años son particularmente activos en la exploración del metaverso, impulsados por una curiosidad genuina sobre sus posibilidades y aplicaciones.

Este segmento demográfico no solo está experimentando con las capacidades del metaverso, sino que también está buscando formas de incorporarlo a sus operaciones comerciales y estrategias de crecimiento. Entre algunas predicciones como las de Publicis Group, se tiene que el metaverso alcanzará su ápice en 2030.

Sin embargo el empleo del metaverso no se limita a la dinámica empresarial. La administración pública también ha hecho más de algún guiño a las últimas tecnologías de realidad virtual. Es por ello que también puede decirse que México tiene una ventaja sobre el resto de sus contrapartes latinoamericanos. Al igual que España, en donde el Gobierno ha realizado inversiones en el metaverso, el Gobierno de México está empezando a hacer lo mismo.

La Policía de la Ciudad de México, por ejemplo, inauguró el primer Centro de Entrenamiento de Realidad Virtual en América Latina, destinado a capacitar a sus agentes utilizando tecnologías inmersivas. Esta adopción en el ámbito de la seguridad pública demuestra que el metaverso no se limita solo a la esfera comercial, sino que también tiene un potencial significativo en la mejora de los servicios públicos y la eficiencia gubernamental.

Los analistas económicos han proyectado un futuro prometedor para la adopción del metaverso no solo en México sino en toda Latinoamérica. Según estimaciones, el metaverso podría contribuir hasta un 5% al Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina para el año 2031. Esta cifra refleja el impacto económico sustancial que esta nueva dimensión digital podría tener en la región, y México parece estar bien posicionado para capturar una parte significativa de esta oportunidad.

Este pronóstico sugiere que la región tiene los cimientos para aprovechar las oportunidades que ofrece el metaverso, lo que puede desencadenar una serie de impactos positivos. En primer lugar, la contribución proyectada al PIB indica la posibilidad de un crecimiento económico sostenible y diversificado, lo que podría ayudar a impulsar la inversión en tecnologías emergentes, la innovación y la creación de empleo en industrias relacionadas con el metaverso.

Además, este escenario también abre las puertas a una mayor inclusión digital y social. La adopción generalizada del metaverso podría democratizar el acceso a oportunidades económicas y educativas, especialmente en áreas donde la conectividad y el acceso a recursos son limitados. Esto podría tener un impacto transformador en la equidad y la igualdad de oportunidades en toda la región.