¿Cuándo y por qué la palabra “altcoin” perdió su relevancia?
Todas las criptomonedas que no son bitcoin (BTC) fueron descritas por primera vez como altcoins por una sola razón: Hubo un aumento de proyectos que copiaron y pegaron el código fuente de bitcoin. Las criptomonedas en las primeras etapas no eran lo suficientemente únicas como para tener un término distintivo, por lo que “altcoin” (monedas alternativas) se ajustaba mejor a su descripción. La comunidad, en ese momento, no pensaba demasiado en otras criptomonedas debido al avance potencial de bitcoin: su futuro crecimiento de precios, casos de uso, adopción por el público en general, etc. Era la líder de las criptomonedas.
Pero las cosas cambiaron cuando la gente se fijó en la plataforma de contratos inteligentes de Ethereum, ya que puede producir “tokens de contratos inteligentes”: criptomonedas con la capacidad de realizar tareas inteligentes de forma autónoma.
Esto llevó a la comunidad a distinguir las altcoins de los tokens. Las altcoins eran ahora monedas que tenían su propia blockchain, y los tokens se definían como criptomonedas creadas en plataformas de contratos inteligentes. El otro factor que está en juego es que hay muchos proyectos de blockchain que están escalando rápidamente y disminuyendo el dominio de bitcoin.
La comunidad empezó a notar debilidades en la correlación de bitcoin con otras monedas a medida que surgían otros proyectos nuevos e interesantes, lo que provocó que el mundo de las criptomonedas se replanteara cómo las ve.
Ahora, cada altcoin se distingue en el mercado por ofrecer un conjunto único de características relacionadas con cosas como la gestión de las transacciones, el lenguaje de scripting, los mecanismos de minería y los algoritmos de consenso. Aunque las características superiores de las altcoins pueden sobrepasar a bitcoin de una manera u otra, su valor sigue dependiendo completamente de la capitalización de mercado de bitcoin.
La comunidad empezó a vislumbrar un mundo en el que varias criptomonedas, no solo bitcoin, pueden alterar el mundo. Ahora, con el creciente dominio de Ether (ETH) en el mercado, está claro que Ethereum es el líder de la innovación en las criptomonedas. Un gran porcentaje de los tokens de hoy en día son contratos inteligentes ERC-20 de Ethereum, por lo que la forma en que los mineros de tokens clasifican sus proyectos se normaliza fácilmente en la comunidad.
El papel de Ethereum en las clasificaciones de criptomonedas
El ecosistema de Ethereum es responsable de todos los avances de las criptomonedas y del interés del público en general, empezando por las ofertas iniciales de monedas (ICO, por sus siglas en inglés), que trastocaron el modelo de oferta pública inicial al permitir que cualquiera comprara la moneda de un proyecto en su lanzamiento. La atención de las ICO condujo a muchos casos de uso para los tokens ERC-20, con los desarrolladores haciendo de su próxima criptomoneda un token basado en Ethereum, mientras los usuarios de criptomonedas tenían un incentivo para aprender más sobre la tecnología. Con una gran variedad de tokens ERC-20, nuestra naturaleza humana debe intervenir para categorizar y asociar las cosas.
El término “altcoin” ya no es una forma aceptable de definir un proyecto, ya que es ambiguo, especialmente ahora con las finanzas descentralizadas (DeFi). La gente quiere saber de qué tipo de moneda se trata, si es una moneda de staking, una de minería de liquidez, un derivado cripto, una stablecoin, un utility token, etc. Están conscientes de que las criptomonedas hacen mucho más que enviar y recibir pagos.
Los “Meme tokens” también han entrado en el vocabulario de las criptomonedas
“Meme token” es un término con el que la mayoría de los usuarios de criptomonedas están familiarizados debido a que Elon Musk tuiteó al mundo sobre Dogecoin (DOGE). Pero la comunidad de criptomonedas tuvo que hacer la distinción entre tokens y meme tokens, ya que las criptomonedas son capaces de una actividad altamente intelectual. Los tokens basados en el contenido de las redes sociales podrían afectar potencialmente a cómo se percibe el sector de las criptomonedas, por lo que había que establecer otra clasificación.
El auge de los tokens no fungibles (NFT, por sus siglas en inglés) demostró que la comunidad de criptomonedas está dispuesta a aceptar y conocer nuevas definiciones. ¿Imaginas que los NFT se describieran como altcoins? Por definición, técnicamente lo son, pero los NFT pueden hacer muchas cosas que demuestran su diferencia. La comunidad reconoce que los NFT son tokens ERC-721 y reconoce las capacidades que poseen. Para empezar, están estructurados para hacer que las criptomonedas sean únicas, sin que dos tokens compartan el mismo valor.
“GameFi” (gaming DeFi) es otro término que se ha añadido al diccionario de criptomonedas. Se trata de la fusión de la tecnología blockchain con los NFT, la minería de liquidez y otros protocolos DeFi. El resultado son juegos en los que la gente puede ganar criptomonedas reales e intercambiar activos. GameFi es todavía nuevo, por lo que existe la posibilidad de que surja algo de moda y dé lugar a más clasificaciones dentro del espacio.
La comunidad de criptomonedas es cada vez más inteligente
La comprensión colectiva de la comunidad de criptomonedas está mejorando rápidamente. Los creadores de contenido, los influencers y los YouTubers también son buenos para convertir la jerga compleja en información fácil de digerir. La comunidad reconoce que clasificar correctamente las criptomonedas aumenta las posibilidades de encontrar buenos proyectos nuevos de forma temprana. Por ejemplo, decirle a alguien que un NFT revolucionario es solo una altcoin influirá en su primera impresión y posiblemente le dará menos valor al NFT.
Clasificar las criptomonedas ayuda a compararlas. Para comparar eficazmente las criptomonedas, hay que saber qué son y si otros están haciendo lo mismo. Por eso no se puede comparar Dash con algo como ADA: una es una criptomoneda de pago, mientras que la otra es el utility token de una plataforma de contratos inteligentes proof-of-stake.
Otro argumento para el colapso de la clasificación de bitcoin vs. altcoins es la variación de las correlaciones entre BTC y otras monedas. Si bien la correlación es alta entre algunos pares, otros demuestran una dependencia más débil entre sí. Por ejemplo, ADA y XRP muestran una menor correlación con otros activos digitales, sin mencionar que las stablecoins como Tether (USDT) muestran correlaciones negativas.
Las clasificaciones también ayudan a la diversificación. Puedes tener tus criptos distribuidas entre varias monedas, pero la frase “no pongas todos tus huevos en una sola cesta” puede aplicarse a ti si todas tus monedas están bajo la misma clasificación.
Aunque está surgiendo un número creciente de nuevos conceptos de criptomonedas, podemos englobarlos a todos —DeFi, GameFi, NFT y meme tokens— en el grupo de las altcoins. Desde el punto de vista de los traders, muchos creen que las altcoins tendrán una mayor rentabilidad en el futuro, aunque quizá haya un consenso más débil que el que existe con bitcoin, por ahora.
Como maximalista de Bitcoin y CEO de un exchange de criptomonedas, me alegro de que surjan más clasificaciones, ya que la industria difícilmente puede lograr una adopción masiva con solo bitcoin.
Este artículo no contiene consejos o recomendaciones de inversión. Todas las inversiones y trading implican un riesgo, y los lectores deben realizar su propia investigación a la hora de tomar una decisión.
Los puntos de vista y las opiniones expresadas aquí son únicamente las del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista y opiniones de Cointelegraph.
Johnny Lyu es el CEO de KuCoin, uno de los mayores exchanges de criptomonedas, que fue lanzado en 2017. Antes de unirse a KuCoin, había acumulado abundante experiencia en las industrias del comercio electrónico, el automóvil y el lujo.
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