Cuidemos las tradiciones catalanas manteniéndolas a la última con el metaverso

Hace aproximadamente un año que, en una inteligente acción de marketing, Mark Zukerberg cambió el nombre de su grupo Facebook por Meta, provocando así el interés del público general por los metaversos, un concepto que ha pasado rápidamente a formar parte de nuestro día a día. 

Pero, no nos engañemos, pese a los esfuerzos dedicados por reclamarlos, los metaversos no son una invención del CEO de Facebook;  los metaversos nacieron mucho antes.

En las últimas décadas, la humanidad ha estado construyendo una realidad digital paralela, que durante el año 2021 se ha visibilizado bajo este concepto. Las razones para que estos nuevos entornos digitales emergieran en ese momento, las podemos explicar por tres motivos principales:

1. El gran acelerón digital que supuso la pandemia que nos recluyó a todos en nuestras casas
2. El social gaming, los videojuegos mediante los cuales los jóvenes y adolescentes se relacionan entre ellos
3. El estado de madurez al que ha llegado la tecnología blockchain, probablemente el más importante. Estos tres puntos clave son los que han permitido que el metaverso emergiera justo en el momento en que lo ha hecho. 

Y como decíamos, el Sr. Zukerberg vio esta oportunidad, y la quiso aprovechar, plantando su bandera en el metaverso. Pero el metaverso (o los metaversos) no pueden pertenecer a una persona, o a una compañía, por grande que esta sea. Los metaversos son nuevos mundos llenos de posibilidades, que deben ser conquistados con creatividad, y que pertenecerán, gracias a las posibilidades que ofrece la tecnología blockchain, a sus creadores, y también a sus participantes. 

El CatVers, el metaverso catalán que hemos lanzado desde el CBCat, nace precisamente con este objetivo: motivar a la gente a empezar a crear en el metaverso, construyendo sus espacios y sus experiencias, y participando en las de los demás. El CatVers empodera los creadores y creadoras en un nuevo entorno inmersivo, donde todo está por hacer, y todo es posible. Y no solo los modeladores 3D tienen un espacio en estos mundos, claro que no; harán falta toda clase de profesionales: ingenieros, diseñadores, guionistas, educadores, realizadores, músicos, empresarios, comunicadores, abogados… 

Así, pretendemos conseguir un metaverso donde la cultura y la lengua catalanas tengan su espacio desde un principio, y no queden diluidas en el inglés, como ya ha pasado en otros sectores (veamos Netflix como claro ejemplo). Todas las culturas y tradiciones deben tener cabida en los metaversos. 

Con este propósito, celebramos la Festa Major del CatVers donde, emulando tradiciones de fiestas mayores populares, dieciséis entidades crearon sus salas personalizadas, en las que ofrecían distintas experiencias a los usuarios que las visitaban. En ella participaron instituciones como el Ateneo Barcelonés, el Museo de Historia de Catalunya, o la Universidad de Barcelona, entre otros. 

También con la misma finalidad, ahora hemos abierto unos espacios donde los usuarios pueden celebrar tradiciones Navideñas típicas catalanas: una sala donde se puede hacer “cagar el Tió”, según manda la tradición, y otra en la que se puede visitar un pesebre a tamaño real, y formar parte del mismo. Quizás, quien sabe, el año que viene podremos tener un pesebre viviente en el metaverso. Además, permitimos a los usuarios que quieran, editar su propio “caganer”, la figura del belén que a todo el mundo divierte, y convertirlo en un NFT (Token No-Fungible), que les pertenezca. 

Con esto, desde el CBCat intentamos animar al público a participar de las tradiciones de siempre, en un nuevo entorno. Porque el metaverso nos puede conectar más que nunca a nuestros seres queridos: ahora podemos celebrar el Tió con esos familiares que viven en la otra punta del mundo, o visitar el Museo de Historia de Catalunya desde Nueva York. Si queremos que nuestra cultura perviva, debemos mantenerla actualizada a los nuevos tiempos.

De momento, a escala global, es evidente que los metaversos se encuentran en fase de construcción. Y se estarán construyendo durante mucho tiempo, y renovando y mejorando. Pero eso no debe impedirnos empezar a explorarlos, vivirlos y disfrutarlos desde este momento. De hecho, la Sagrada Família hace décadas que está en construcción, y aun así es uno de los monumentos más visitados del mundo; hasta se celebran misas en su interior. Debemos ver los metaversos como la Sagrada Família que, además, podemos construir entre todos y todas. ¿Te animas?

Sobre el autor: Quirze Salomó

Quirze Salomó es una figura destacada en el mundo de la tecnología y el emprendimiento. Formado como perito mercantil y analista programador, Salomó es un emprendedor en serie; ha fundado y dirigido distintas empresas, como Productos Químicos Arco Iris, Home Meal Replacement, Boira Digital y Crypto Franchise. Actualmente es presidente de la Barcelona Blockchain Week, y CEO del CBCat (Centre Blockchain de Catalunya), donde disfruta de la revolución digital, estando al tanto de las últimas novedades en tecnología blockchain y metaversos. 

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