Human Protocol: ¿Cómo pueden las criptomonedas destrabar los mercados laborales?
Las criptomonedas para el trabajo son una idea nueva. Así lo indicaron desde Human Protocol a través de su blog oficial, en el que destacaron, entre otras cosas, el papel del token HMT:
HMT es un token de utilidad. Es el combustible del Protocolo HUMAN, una manera de que los solicitantes financien el trabajo, incluyendo la validación de los datos que suben, y la verificación de la calidad de la respuesta de los trabajadores. Según explicaron, es la recompensa que se da a los trabajadores por completar los trabajos.
Además, afirmaron que HUMAN es un nuevo uso de la criptotecnología, que recompensa a las personas por el trabajo, lo que significa que pueden ganar a distancia, sin necesidad de pasar por intermediarios.
Libertad, transparencia y autonomía
“La propiedad vuelve a estar donde debe estar. Hay mucho que admirar en los principios de las criptomonedas, pero a menudo la conversación se detiene ahí. Los principios son importantes, la base de la popularidad y el poder de esta tecnología, pero en la práctica necesitamos definir qué significan estos principios, cómo se utilizan, cómo se realizan para aportar un nuevo valor a los usuarios”, señalaron en el blog de Human Protocol. Y aclararon que no son los principios, sino lo que representan y lo que permiten, lo que provocará la transformación global.
La transparencia es poder, pero ¿qué facilita?
Dado que HMT es una moneda digital que se mantiene en un libro de contabilidad blockchain, puede soportar un sistema automatizado en el que los intermediarios son sustituidos por la tecnología. Por ejemplo, en el protocolo HUMAN:
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El solicitante presenta el trabajo en una recompensa inteligente o “smart bounty” (contiene HMT, que se mantiene en custodia)
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El protocolo gestiona de forma inteligente el trabajo, distribuyéndolo entre las bolsas de trabajo pertinentes. Se trata de herramientas necesarias para completar un trabajo, estandarizadas para garantizar el control de calidad
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Los trabajadores completan las tareas
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El oráculo de la red comprueba el trabajo y actualiza la recompensa inteligente para liberar fondos a las direcciones de wallet de los trabajadores.
“La automatización funciona gracias a la criptografía. Al no haber intermediarios -sin tasas de tramitación, retrasos o complicaciones de jurisdicción fiscal transfronteriza, ya que las anticuadas y arcaicas instituciones financieras intentan seguir el ritmo de la automatización- las computadoras son libres de dar rienda suelta a su potencial. En esencia, eso es lo que hace la criptografía: da rienda suelta al poder de los ordenadores, saltándose los sistemas codificados y las reglas que ya no sirven al usuario. Los beneficios del progreso tecnológico serán limitados mientras se mantengan los sistemas, estructuras y procesos que definen nuestro funcionamiento”, precisaron.
¿A quién desintermedia? ¿Cuáles son los beneficios?
Los particulares pueden trabajar en HUMAN Protocol a través de un intermediario, o bien optar por tratar directamente con la empresa para la que trabajan.
Inicialmente, el Protocolo HUMAN está siendo aplicado por los profesionales del Machine Learning para reunir los datos que necesitan para construir productos de IA representativos. Los datos que necesitan se publican como trabajo en el Protocolo y, actualmente, millones de trabajadores etiquetan datos a través del mismo.
Hay muchos intermediarios que ofrecen soluciones similares al Machine Learning, como Scale.AI o Mechanical Turk. Estos toman las solicitudes de los profesionales del ML y las distribuyen a los trabajadores, pero cualquier comparación con el Protocolo de HUMAN es limitada, ya que los mercados de trabajo que ofrecen son cerrados, centralizados y se limitan únicamente al etiquetado de datos.
Hay que destacar que, en Human Protocol:
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Cualquiera puede solicitar o completar un trabajo.
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Nadie decide qué trabajos pueden ponerse en el mercado.
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Se pueden integrar fácilmente nuevas herramientas.
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Las empresas que quieran gestionar y pagar a sus usuarios por el trabajo (incluido el microtrabajo) pueden hacerlo, utilizando HUMAN Protocol como solución back-end.
Las ventajas de desintermediar este proceso son muchas. La reducción de costes, la rapidez y la automatización son sólo algunos de los beneficios prácticos; por no mencionar los beneficios adicionales de la privacidad de los datos, la propiedad de los activos, la transparencia y otros temas asociados a la tecnología blockchain.
Aunque son muchos los beneficios de un sistema peer-to-peer, es importante señalar que MTurk y Scale.AI pueden trabajar con el protocolo Human. Muchas de sus limitaciones actuales, ya sea por la diversidad de encuestados o de aplicaciones, pueden resolverse trabajando con la tecnología de código abierto de HUMAN.
El precio de los intermediarios
Desde Human Protocol recordaron que los intermediarios son una consecuencia de un mundo que los necesitaba. Nos han servido a la mayoría durante mucho tiempo. Se aseguran de que cada participante en un comercio cumpla los términos del acuerdo. Son ejecutores, contables, aseguran el mercado.
Sin embargo, también explicaron que tienen un precio. “Los intermediarios necesitan sacar una tajada para seguir vivos, trasladando el coste a los usuarios de ambos extremos del mercado (y también, fundamentalmente, contribuyendo a la ineficiencia del mercado). Además, es lógico que, si son responsables de las operaciones, les interese controlar quién negocia, controlar el flujo de dinero y determinar las reglas del mercado. Pero si esto se debe a la preocupación por el mercado es algo que se puede debatir. En cualquier caso, el control conlleva una limitación”, puntualizaron.
“Un intermediario central de control limita el flujo de la oferta, la demanda y la innovación, ya que la gobernanza se produce de arriba abajo. Es exclusivo; determina quién puede comerciar y quién no. Determina lo que se puede comerciar y lo que no. La eficiencia del mercado está directamente relacionada con el tamaño y la libertad de un mercado. Abrir las puertas puede significar nuevas oportunidades para los antiguos mercados, y el potencial de crear mercados que antes eran pragmáticamente imposibles, como los que dependen de los micropagos”, agregaron luego.
De esta manera, afirmaron que, si bien los intermediarios eran algo que la sociedad podía ofrecer, con el creciente desarrollo de la criptografía, ya no son la única solución.
Criptografía: ¿Qué permite un libro de contabilidad de blockchain?
Un token ERC-20 significa que los usuarios pueden comprobar en Etherscan dónde se mueven los fondos en los contratos del Protocolo Humano. Puede parecer innecesario para muchos, pero esta capacidad de autocomprobación es esencial en una red descentralizada.
En una red centralizada, los usuarios deben simplemente confiar en los números que se les dan, y confiar en que no hay colusión, confiar en que las recompensas se están distribuyendo de manera justa. “Esto no es justo y, desde luego, no es sostenible con los crecientes mercados de trabajadores autónomos. La confianza puede llevarnos hasta cierto punto, pero cuando se trata de recompensar el trabajo, y cuando se trata de recompensar a una fuerza de trabajo, la fe ciega no puede ser la respuesta”, señalaron.
“Por supuesto, es una hipótesis asumir la colusión, o el juego sucio, pero es una posibilidad peligrosa que es mejor prevenir. En cierto sentido, esta ventaja puede pasarse por alto, ya que sólo cuando las cosas van drásticamente mal se requeriría una llamada al cambio; HUMAN está diseñado para ofrecer la transparencia necesaria para hacer que la colusión sea imposible o muy difícil, y, dado que la culpabilidad es rastreable a través de blockchain, también hace que no tenga sentido”, agregaron.
Todo esto culmina en un sistema sin confianza. La propia estructura de un token criptográficamente seguro cambia la forma en que podemos trabajar; y aunque los principios de un token de este tipo son poderosos, desde Human recomiendan hacer una pregunta importante: ¿cómo cambia esto las cosas para mejor?
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