Los inversores institucionales no salvarán a las criptomonedas, pero las ayudarán a crecer

El estado de la economía mundial ha empujado a los inversores institucionales a buscar métodos alternativos de inversión. Y cada vez más a menudo, Bitcoin (BTC) se está convirtiendo en una herramienta de este tipo.

Desde agosto, la empresa de inteligencia de negocios MicroStrategy ha comprado BTC por un total de 425 millones de dólares. Al mismo tiempo, el gestor de activos digitales Grayscale Investments recaudó cantidades récord de dinero tanto en el primer como en el segundo trimestre de este año (1.400 millones de dólares en total).

Pero, ¿deberíamos celebrar a los inversores institucionales como los “salvadores” de las criptomonedas? O, por el contrario, ¿son ellos los que conducirán a la caída de la industria de los activos digitales?

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Los activos seguros están en una crisis mundial

Antes de responder a las preguntas anteriores, veamos la razón principal por la que las instituciones están mirando a las criptomonedas. Hay una crisis mundial cuando se trata de generar retornos de los activos seguros del mercado tradicional. Los instrumentos de bajo riesgo, como las cuentas de ahorro y los bonos de alta calidad como los del Tesoro de EE.UU., han estado proporcionando rendimientos mínimos en los últimos años. Los rendimientos son tan bajos para estos activos que la inflación a menudo se come los beneficios y deja a los inversores con un retorno de inversión negativo.

Además, algunas naciones como Dinamarca, Suiza y Japón utilizan tasas de interés negativas para impulsar la economía. Si bien es una buena manera de luchar contra la deflación, los tipos de interés negativos y bajos desalientan a la gente a invertir en activos seguros. Sin embargo, esto no significa que los instrumentos tradicionales estén fallando a los inversores. Por el contrario, estamos atravesando una fase de desarrollo de la economía mundial en la que las inversiones de bajo riesgo aún no proporcionan rendimientos decentes a los inversores.

Dicho esto, esto impulsará el interés en las criptomonedas hasta que la economía mundial avance a una fase en la que los activos tradicionales empiecen a rendir bien de nuevo. En comparación con el mercado general, la industria de los activos digitales se ha desarrollado a un ritmo mucho más rápido, con múltiples razones detrás de este fenómeno. El escrutinio reglamentario que rodea al mercado es limitado, y los proyectos de criptomonedas tienen una mentalidad diferente. Además, el nivel tecnológico actual permite y alienta a las empresas del espacio a innovar.

Como resultado, las criptomonedas se han convertido en una industria madura que tiene un historial de proporcionar excelentes rendimientos a los inversores. Además, incluso en medio de una crisis económica global, la volatilidad de Bitcoin está en niveles récord. Y cuanto menos volátil es un activo, menores son los riesgos para los inversores.

Mientras que lo anterior hace atractiva las criptomonedas para los individuos, el actual mercado de activos digitales ofrece a los inversores institucionales una forma de satisfacer las expectativas de retorno de la inversión de sus inversores. Hay mucho en juego, y están buscando en Bitcoin por una muy buena razón.

El impacto del reciente aumento institucional en las criptomonedas

La gente en el ecosistema cripto a menudo piensa que los inversores institucionales serán los principales facilitadores del próximo boom de Bitcoin. Sin embargo, ese no es exactamente el caso aquí. Y lo contrario – que las instituciones corromperán el mercado cripto con sus inversiones del tamaño de una ballena – tampoco es cierto.

En lugar de “destruir” el mercado cripto o lanzar Bitcoin “a la luna”, los inversores institucionales ayudan a que el mercado cripto madure, haciéndolo más eficiente. Por ejemplo, cuando el BTC está infravalorado, utilizan esta ineficiencia para hacerlo subir, y lo hacen bajar cuando el activo digital está sobrevalorado.

Dado que los inversores institucionales son inversores experimentados con una vasta experiencia en el mercado monetario, siguen las prácticas anteriores para limitar sus riesgos y maximizar sus rendimientos. Esto amortigua la volatilidad y aumenta la liquidez del mercado. Sin embargo, factores como la tasa de adopción de Bitcoin y la situación macroeconómica actual tienen un impacto más sustancial en el movimiento subyacente del precio BTC a largo plazo que los inversores institucionales.

Por otro lado, un mercado más maduro también significa que las ganancias potenciales de las inversiones en criptos también disminuirán. Pero esto no llevará a la caída de la industria de los activos digitales. Por el contrario, es una señal del desarrollo natural que todos los nuevos mercados atraviesan al entrar en la fase de adopción masiva, lo que resultará en un sector cripto más maduro, más estable y menos volátil.

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Dicho esto, tomar posiciones fuertes en las criptomonedas, como lo hizo recientemente MicroStrategy, proporciona una señal de compra a otros inversores institucionales que verán las criptomonedas como una clase de activo serio. Es importante señalar que el caso de MicroStrategy con Bitcoin tiene una gran importancia, considerando que la empresa es una empresa que cotiza en la bolsa de valores de Nasdaq.

Por lo tanto, tiene requisitos estrictos de diligencia financiera para sus accionistas. Al adquirir cantidades sustanciales de BTC, MicroStrategy cree firmemente que este movimiento no tendrá efectos adversos en el precio de sus acciones o en la responsabilidad social corporativa.

Si una empresa privada – no importa cuán grande – hubiera tomado la misma posición en las criptomonedas, no sería una noticia tan importante como la de MicroStrategy.

Con los inversores institucionales, las criptomonedas esperan un futuro más brillante

En 2017, no teníamos muchos inversores institucionales en el mercado cripto. Con tanto miedo a quedar por fuera, hype y fraude, así como a tantas amenazas cibernéticas, la especulación fue la principal fuerza que impulsó la locura de la ICOs y el mercado alcista extremo.

Con una regulación eficaz en múltiples jurisdicciones y con inversores institucionales que hacen que el mercado sea más efectivo, las criptomonedas están más maduras que nunca. Menos riesgos y buenos rendimientos hacen de Bitcoin una inversión alternativa atractiva para las instituciones. Y ahora, están llegando a la industria en gran número.

Este artículo no contiene consejos o recomendaciones de inversión. Cada movimiento de inversión y comercio implica un riesgo, y los lectores deberían llevar a cabo su propia investigación al tomar una decisión.

Los puntos de vista, pensamientos y opiniones expresados aquí son exclusivamente del autor y no reflejan ni representan necesariamente los puntos de vista y opiniones de Cointelegraph.

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