El caso contra BitMEX es una brújula que apunta hacia el futuro de la regulación de las criptomonedas
En los últimos años la industria de las criptomonedas ha madurado en todo el panorama económico mundial, pero todavía se encuentra con problemas de alto perfil. El 1 de octubre, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos presentó cargos criminales contra cuatro ejecutivos de la plataforma comercial BitMEX – incluyendo su fundador, Arthur Hayes – por violar la Ley de Secreto Bancario. Uno de los ejecutivos en cuestión ha sido arrestado, según una declaración del Departamento de Justicia.
Además, la Comisión de Comercio de Futuros de Mercancías, CFTC por sus siglas en inglés, también presentó una acción civil contra BitMEX y tres de sus ejecutivos por violar las regulaciones contra el lavado de dinero.
El organismo regulador alegó que BitMEX y sus altos mandos han estado involucrados en actividades turbias durante años, como el uso de políticas débiles de AML/KYC que los malos actores pueden explotar usando varios métodos como VPNs para enmascarar sus identidades virtuales, entre otros.
Además, BitMEX hace uso de una compleja estructura corporativa internacional que incluye un número de entidades individuales separadas, y como resultado, no está del todo claro dónde se encuentra exactamente la empresa. Así mismo, cabe señalar que BitMEX promueve abiertamente en su sitio web que está registrada en las Seychelles y que tiene oficinas en Hong Kong y Nueva York.
Los clientes de BitMEX parecen no tener límites en sus retiros de Bitcoin (BTC) pero tienen que pasar por una comprobación de identificación, aunque las comprobaciones sólo serán obligatorias para los traders en febrero de 2021. A lo largo de 2019, múltiples informes afirmaron que la CFTC estaba investigando al exchange porque los residentes de EE.UU. podían comerciar derivados de criptomonedas en la plataforma, aunque no estaba registrada como exchange de derivados con la CFTC ni como proveedor de servicios monetarios con ningún estado de EE.UU., lo cual es ilegal.
John Jefferies, analista financiero jefe de CipherTrace – una empresa de inteligencia de Blockchain – dijo a Cointelegraph que entre noviembre de 2014 y septiembre de 2020, BitMEX no presentó ni un solo informe de actividad sospechosa, un medio para informar de posibles transacciones ilícitas al gobierno de EE.UU., añadiendo:
“BitMEX ha estado bajo investigación de la CFTC desde principios de 2019 por permitir a los estadounidenses hacer operaciones en la plataforma, y se les dio tiempo para mejorar su Programa de KYC para excluir efectivamente a los estadounidenses. No es que las fuerzas del orden no hayan seguido y advertido a BitMEX, sino que la continua negligencia y falta de cumplimiento de BitMEX llevó a que el martillo finalmente cayera sobre ellos”.
Los ejecutivos de BitMEX bajo fuego
Las banderas rojas estaban ahí para que todos las vieran. Para empezar, el sitio web de BitMEX anunciaba expresamente que “No se requiere ningún nombre real u otra verificación avanzada” para hacer uso de la plataforma.
Como parte de su queja, la CFTC ha afirmado que Hayes, Ben Delo y Sam Reed – el equipo ejecutivo de BitMEX – estuvieron en contacto con múltiples consultores de cumplimiento, uno de ellos incluso le dijo a Reed que la compañía necesitaba implementar KYC más estrictos para cumplir con las sanciones internacionales.
En otras palabras, los informes señalan el hecho de que BitMEX tenía amplias advertencias para hacer correcciones pero decidió no hacerlas caso, lo que dio lugar a que los ejecutivos se enfrentaran ahora a severas acusaciones. La acusación del Departamento de Justicia tiene a cada uno de los acusados enfrentando hasta 10 años de cárcel. No sólo eso, sino que según Jefferies, la acción de la CFTC podría dar lugar a la pena más cara que jamás haya sido pagada por una institución financiera.
Sin embargo, cabe señalar que la denuncia de la CFTC no se centra únicamente en los procedimientos AML de BitMEX, sino más bien en su falta de registro ante las autoridades competentes. De hecho, es la acusación del Departamento de Justicia la que mira más de cerca el lado del AML. Maddie Kennedy, directora senior de comunicaciones en Chainalysis – una firma de análisis de criptomoneda – le dijo a Cointelegraph:
“El monitoreo de transacciones es un componente central de un programa de cumplimiento, como lo es KYC. Algunas de las actividades criminales citadas en la acusación son de hace varios años, lo que demuestra la necesidad de que los procedimientos de cumplimiento adecuados estén en marcha desde el primer día. En el caso de los exchanges de divisas y las instituciones financieras de las jurisdicciones que aún no han establecido reglamentos, las noticias de hoy ilustran la importancia de adelantarse a la curva de cumplimiento”.
¿No hay un resquicio de esperanza?
A pesar de la acción en contra de BitMEX por parte de la CFTC, expertos jurídicos como John Wagster, copresidente de la unidad de tecnología Blockchain y monedas digitales de Frost Brown Todd, creen que a pesar de que los reguladores estadounidenses alegan que BitMEX estaba siendo operado a través de un “laberinto de entidades corporativas”, hay muchas razones legítimas por las que una empresa puede optar por utilizar un modelo de negocio de este tipo que se extiende a través de múltiples jurisdicciones:
“Necesitaremos ver los detalles del caso de la CFTC antes de poder determinar si la estructura estaba destinada a lograr propósitos nefastos. Es común que los organismos de cumplimiento busquen todos los remedios posibles para aumentar su influencia en las negociaciones, así que no le daría demasiada importancia a esa parte de las alegaciones”.
Dicho esto, las opciones para BitMEX y su equipo ejecutivo siguen siendo relativamente limitadas porque, además de los cargos civiles, el fiscal del Distrito Sur de Nueva York también ha acusado a Hayes, Delo, Reed y Gregory Dwyer -jefe de desarrollo de negocios de BitMEX- de cargos penales por violar y conspirar para violar la Ley de Secreto Bancario, o BSA, por sus siglas en inglés.
La BSA es la ley primaria que rige las regulaciones AML/KYC de Estados Unidos que los bancos y las compañías financieras están obligados a seguir. La BSA también contiene normas sobre si las entidades deben registrarse o no como empresas de servicios monetarios. Las directrices establecidas por la BSA sirven como el método principal del gobierno americano para prevenir el lavado de dinero y las actividades relacionadas con la financiación del terrorismo.
¿Qué es lo próximo para BitMEX?
Ampliando el futuro de BitMEX, Dean Steinbeck, director de operaciones de Horizen Labs – una firma de tecnología Blockchain orientadas a la privacidad – dijo a Cointelegraph que los reguladores de EE.UU. a menudo toman mucho tiempo antes de hacer cumplir cualquier acción importante, especialmente en relación con las empresas que dependen de las nuevas tecnologías, añadiendo:
“Si se descubre que BitMEX ha estado operando ilegalmente, además de las multas y penalizaciones, la CTFC también tratará de ‘desembolsar’ o recuperar todos los beneficios generados por el exchange. Esto es coherente con la idea general de que los ‘malhechores’ no deben beneficiarse de su actividad ilegal”.
Añadió además que, aunque el sitio web de BitMEX indica claramente que no puede ser utilizado por personas de EE.UU., los reguladores exigen que las empresas tomen medidas activas para garantizar que los residentes no utilicen realmente el sitio. Añadió: “Incluso para sitios web de apuestas y ICO, no es suficiente para el negocio simplemente declarar ‘No se permiten personas de EE.UU.’“.
La acción reguladora podría ser un cambio de juego para la industria de las criptomonedas
Las acusaciones contra BitMEX son graves y constituyen un argumento convincente a favor de la descentralización. Para sus defensores, uno de los atributos más favorables de la descentralización es que no hay una sola entidad o persona que se encargue del protocolo porque lo dirigen sus usuarios mediante una gestión descentralizada.
Si la gobernanza está descentralizada, no existe una autoridad de control a la que los reguladores puedan apuntar para hacer cumplir la ley. Cualquier medida reguladora contra BitMEX probablemente hará que los protocolos existentes se descentralicen más rápidamente, y que los futuros protocolos se descentralizen inmediatamente.
Dicho esto, aunque los exchanges descentralizados son conocidos por sus controles mínimos de AML y KYC, este último acontecimiento ha planteado la cuestión de si los DEX también están obligados a cumplir con la BSA. Si lo hacen, muchos exchanges de criptomonedas tendrán que replantearse sus actuales marcos de compra/venta.
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