La filtración de la FinCEN sugiere que las nuevas medidas contra el lavado de dinero no son suficientes… para los bancos
Los documentos filtrados de la Red de Control para los Delitos Financieros de los Estados Unidos (FinCEN) implican que los esfuerzos renovados de la agencia para identificar las transacciones ilícitas y el lavado de dinero pueden no ser suficientes. Pero en esta ocasión, las instituciones descritas como culpables no son exchanges de criptomonedas, sino algunos de los bancos más conocidos del mundo.
BuzzFeed News informó el 20 de septiembre que recibió miles de documentos que detallaban “informes de actividades sospechosas”, o SARs, de los bancos a la FinCEN entre 2000 y 2017. Según el medio de comunicación, los informes “ofrecen una visión sin precedentes de la corrupción financiera mundial, los bancos que la permiten, y los organismos gubernamentales que observan cómo florece”.
Algunas de las informaciones más polémicas de los SARs implican que la FinCEN tomó pocas o ninguna medida para impedir que los bancos permitieran el lavado de dinero de personas e instituciones sospechosas en algunas ocasiones.
“Las leyes que estaban destinadas a detener los delitos financieros han permitido que florezcan”, declaró BuzzFeed News. “Mientras un banco presente un aviso de que puede estar facilitando una actividad criminal, se inmuniza a sí mismo y a sus ejecutivos de la persecución penal. La alerta de actividad sospechosa les da efectivamente un pase libre para seguir moviendo el dinero y recolectando las cuotas”.
Las nuevas leyes AML para instituciones financieras
La noticia de la filtración se produce solo una semana después de que el ente regulador financiero anunciara que introduciría cambios radicales en sus normas contra el lavado de dinero (AML) destinadas a identificar y combatir las actividades financieras ilícitas mediante el mantenimiento de registros sólidos y requisitos de evaluación de riesgos.
Los reglamentos son una cosa; la aplicación de la ley es otra. BuzzFeed News declaró que, aunque el organismo de vigilancia financiera recibió millones de SARs en un período de 17 años de muchas instituciones financieras, no siempre fue capaz de obligar a los bancos a prevenir eficazmente el lavado de dinero.
Los SARs revelan que los problemas de lavado de dinero han penetrado profundamente en las instituciones financieras, y BuzzFeed informó que muchos bancos, entre ellos JPMorgan Chase, HSBC, Standard Chartered, Deutsche Bank y Bank of New York Mellon, permiten “un sistema financiero en la sombra” a través del cual los fondos ilícitos pueden viajar libremente.
Según los expertos, “algunos bancos tratan los SARs como una especie de tarjeta para salir de la cárcel, presentando alertas sobre una enorme variedad de transacciones sin llegar a detenerlas”, informó el medio de comunicación. “En algunos casos, los bancos presentaron numerosos informes sobre los mismos clientes, detallando sus presuntos delitos a lo largo de los años mientras seguían acogiendo con agrado sus negocios”.
“Las redes a través de las cuales el dinero sucio atraviesa el mundo se han convertido en arterias vitales de la economía global. Permiten un sistema financiero en la sombra tan amplio y tan descontrolado que se ha vuelto inextricable de la llamada economía legítima. Los bancos con nombres conocidos han ayudado a que así sea.”
La conexión de Mt. Gox
Según TrustNodes, la institución que más informes de actividades sospechosas tuvo con la FinCEN en la última filtración fue Mayzus Financial Services (MFS), supuestamente un intermediario fiat del exchange de Bitcoin BTC-e. El exchange estaba supuestamente involucrado en el movimiento de fondos del infame hackeo de Mt. Gox, en el que los ladrones robaron 850,000 Bitcoin (BTC) en 2014. Las criptomonedas robadas valdrían hoy en día unos USD 9,300 millones.
MFS y sus subsidiarias, incluida MoneyPolo, han emitido varias declaraciones sobre la naturaleza de la relación, aunque la empresa ha declarado que BTC-e “nunca ha tenido ningún vínculo directo con nuestra empresa, ni estructural ni personal”.
Se informa que hay más de 2,000 documentos en los últimos archivos filtrados de la FinCEN.
Sigue leyendo: